DeepSeek, Donald Trump y La Paradoja de Jevons
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La irrupción de DeepSeek en nuestras vidas ha traído un tsunami de reacciones, no solamente en el sector tecnológico, sino también en el social, tanto, que es complicado no encontrarse a alguien que no te pregunte sobre ello en la última semana. La mayor eficiencia en coste de esta nueva IA puede aumentar la demanda de datos, lo que se alinea curiosamente con la Paradoja de Jevons, y va a tener implicaciones geopolíticas en la carrera por la innovación.
Vaya por delante lo evidente, este no es un artículo científico, no pretende serlo, es más bien un resumen que intenta ordenar ideas y temas de conversación que he tenido con clientes y amigos en las últimas 48 horas.
Por situar la conversación para los más despistados, DeepSeek es un nuevo modelo de LLM (Large Language Model, Inteligencia Artificial) que no sólo va a competir con OpenAI en capacidades, sino que posee tres características que la hacen muy relevante:
- Ha sido creada por una Compañía establecida en China,
- Ha sido desarrollada a partir de un código abierto,
- Ha nacido en un escenario de escasez de chips a un coste muy competitivo.
Estas tres características han puesto en jaque al ecosistema de desarrollo de la Inteligencia Artificial, la primera por sus implicaciones geopolíticas, la segunda porque demuestra que las restricciones agudizan el ingenio y nos lleva a un escenario más democrático en la IA que va a acelerar la innovación, y la tercera porque marca una mejora técnica que seguro se va adoptar en otras partes del mundo. Desde el lanzamiento de ChatGPT en octubre de 2022, no se había producido un salto hacia delante similar al de DeepSeek (en apenas unas semanas ya tiene más descargas que ChatGPT para dispositivos móviles en Estados Unidos…).
Sin embargo, sin nos abstraemos de los titulares y ponemos la mirada en el impacto en las inversiones en infraestructura digital, aún es pronto para saber el impacto real de esta nueva tecnología en el mercado de los Centros de Datos. Lo que si parece evidente es que, en el corto plazo, lo que podría ocurrir es que la estimación de ventas de NVIDIA y el coste de hardware por megawatio desciendan. Ahora bien, esto puede suponer dos escenarios, el primero es que con el mismo coste necesites la mitad de hardware y los proyectos para IA por tanto sean más pequeños, o lo más probable en mi opinión, que con el mismo coste puedas instalar el doble de hardware y por tanto los proyectos sean más intensivos.
La razón para decantarme por la segunda la discutía con un amigo esta mañana hablando sobre la Paradoja de Jevons, que básicamente viene a decir que cuando se produce un aumento sustancial de la eficiencia en un factor de producción, en este caso el hardware, la caída de precio del mismo promueve su demanda (siempre y cuando esta demanda sea lo suficientemente elástica, y la tecnología claramente lo es). Concretamente, la paradoja de Jevons implica que la introducción de tecnologías con mayor eficiencia energética puede aumentar el consumo total de energía. Esto pasó con la máquina de vapor y el consumo de carbón, pero también ha pasado con la industria del automóvil eléctrico o incluso con el tráfico de datos asociados al 5G frente al 4G, es decir, el 5G es más eficiente en uso energético que el 4G, pero esa misma eficiencia ha estimulado al alza la demanda energética por aumento de tráfico de datos.
Por tanto, más allá de las consecuencias concretas para cada Hyperscaler, que ese es un tema que da para otro artículo, la aparición de DeepSeek es simplemente un paso más en una curva de reducción de costes natural para una tecnología que aún está por desarrollar, y que no tiene por qué suponer un parón ni en la inversión ni en la demanda de procesamiento de datos, más bien al contrario, podríamos encontrarnos ante un nuevo escenario de innovación que potencie, aún más, la digitalización de la economía.
Ahora bien, lo que sí que va a suponer, eso seguro, es un toque de atención para Estados Unidos en su carrera por seguir liderando el mundo a nivel macroeconómico. Donald Trump es la respuesta que han elegido los ciudadanos americanos que, en su mayoría, se sienten amenazados por este nuevo mundo que viene, y que va a estar basado irremediablemente en la energía y la tecnología. Trump quiere ser líder no sólo en producción de energía (petróleo y gas fundamentalmente), sino también en la producción de chips dentro de sus fronteras (acaba de anunciar una subida de aranceles a la importación de chips de Taiwán). Si consigue eso, y lo une con la revaloración del dólar (que parece probable con todos estos nuevos aranceles y la llegada de capitales desde países emergentes) y con seguir siendo un polo de generación de talento (todo esto va de programadores, no lo olvidemos) igual consigue competir con el coste de capital menor de otras geografías.
En fin, nuevos problemas, nuevas soluciones, y un mundo un poco distinto… o al menos con temas nuevos, Energía y Digitalización, que son los ejes que van a marcar nuestra agenda en los próximos años… eso y la Demografía, pero ese ya es otro tema. En cualquier caso, y viendo que la evolución de los bonos soberanos va a hacer que el debate sobre las yields sea bastante aburrido (en su mayoría deberían permanecer planas) siempre está bien buscar nuevos ángulos para crear de valor, es lo que hacemos en Colliers todos los días.
Gonzalo Martín
Director | Capital Markets
Colliers