Más allá de Madrid. El potencial “escondido” del resto de España para los Data Centers
El sector de los Data Centers se encuentra viviendo, durante la última década, un crecimiento exponencial en nuestro país. España es uno de los enclaves más atractivos para los inversores de esta industria, y destaca ya como el principal hub de interconexión del sur de Europa. Su posición geográfica privilegiada, los altos niveles de interconexión interna e internacional gracias a la red de fibra óptica y a los 33 cables submarinos que llegan a nuestras costas, y el acceso a energías renovables son algunos de los motivos que explican el incremento de potencia instalada entre nuestras fronteras. El aumento de esta potencia beneficia a la totalidad de la población. No solo porque la cercanía de los Data Centers al usuario final mejora y agiliza su acceso a internet, sino también porque el impacto de la industria en el PIB nacional se estima en miles de millones de euros.
Hasta ahora, el epicentro de esta industria se encontraba en la región de Madrid, impulsada por grandes focos de conectividad en torno a la A-1 y la A-2. Según los datos propios de Spain DC, en 2022 la potencia instalada en la Comunidad de Madrid alcanzaba los 147 MW, 44 MW más que en el Q4 de 2021. Y la previsión es que este incremento se mantenga a un ritmo muy superior a los de los FLAP -Frankfurt, Londres, Ámsterdam y París, principales mercados del continente-, hasta superar los 613 MW para 2026.
Cataluña no se queda atrás al hablar de crecimiento de nuestro sector, especialmente tras la inauguración de la Barcelona Landing Station, a lo que se suman otras iniciativas como Conectividad Inteligente o 5G Barcelona. Los grandes operadores ya se encuentran invirtiendo en esta región, junto con nuevos actores que ya han anunciado su incorporación al mercado catalán. Así, según datos de la Asociación, Cataluña cuenta con una tasa de crecimiento medio hasta 2026 del 52,30%, muy superior a la del 22% estimada para otros mercados emergentes como Milán, Varsovia o Johannesburgo. Las previsiones concluyen que, a medio plazo, la comunidad contará con 124 MW de potencia instalada y confirmada.
Sin embargo, los inversores están comenzando a fijarse en otros puntos de la geografía española. Comunidades Autónomas como Aragón o Castilla-La Mancha se están perfilando como destinos deseables para el sector, tras los últimos anuncios de grandes compañías como Microsoft, Amazon Web Services (AWS) o Meta de instalarse allí. Ambas regiones cuentan con todos los elementos imprescindibles para el desarrollo de la industria del Data Center, esencial para la descarbonización y digitalización de la economía. Entre los factores más determinantes, se encuentran la conectividad que ofrecen dichas regiones, la facilidad de acceso a suelo y, sobre todo, la gran oferta de energías renovables, fundamental para un sector que es nativo sostenible.
Puesto que, como se ha observado en otros lugares del país, la conectividad se favorece cuanto mayor es el número actores presentes en un lugar, cabe esperar que durante los próximos años observemos este efecto clúster en lugares de la España vaciada, que observa a la industria digital como una solución eficiente, responsable medioambientalmente e innovadora al fomento de su economía.